El interés por los chilenos de guardar sus ahorros en dólares ha ido creciendo en los últimos años. Empezó a aumentar con fuerza con el estallido social, para sólo intensificarse con la pandemia y la incertidumbre política, económica y social del país en los años siguientes. 

Hoy, según cifras de la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), las cuentas corrientes en Chile ya superan las 800 mil, y un tercio se abrieron el último año. Si bien las cifras de crecimiento todavía son altas, este fenómeno muestra signos de desaceleración.

Hoy en el mercado hay quienes proyectan un dólar en $ 1.000 o incluso más en 2025 -si se cumplen ciertos escenarios-, aunque no existe consenso. Ocurra o no, considerando el precio que aún hoy muestra la moneda estadounidense, es fundamental tener claro cuáles son los pros y contras de ahorrar en dólares.

Fortaleza y también debilidad

El dólar, al ser una moneda fuerte y de referencia internacional, es una buena guarida ante situaciones de incertidumbre económica y volatilidad, aportando diversificación y cumpliendo un carácter defensivo con relación al peso chileno.

En otras palabras, cuando el peso se deprecia en episodios de volatilidad o caídas del mercado, el precio del dólar generalmente se correlaciona negativamente, explica Héctor Gatica, portfolio manager de BCI Asset Management. Y advierte: “hay que ser conscientes de que el caso contrario también puede darse, por lo que se debe evaluar el riesgo antes de invertir en alguna moneda en particular”.

Es decir, lo que es su fortaleza también es su debilidad. Joaquín Spörke, gerente de productos transaccionales de BTG Pactual Wealth Management, indica que el principal riesgo asociado a mantener ahorros en dólares es que “en ciclos positivos de las monedas emergentes y del peso chileno, los inversionistas perderán poder adquisitivo medido en moneda local, experimentando una pérdida por tipo de cambio”.

Así también lo indica Daniel Ospina, director de Productos de Santander Asset Management, quien dice que el valor del dólar puede bajar inesperadamente ya sea por mayores recortes de tasa por parte de la Reserva Federal, noticias positivas en la economía local, alza en el precio del cobre, o por un rally generalizado de monedas emergentes.

“Además, se podrían perder oportunidades de inversión en activos chilenos que continúan siendo atractivos, como la renta fija y la renta variable local”, comenta.

Por lo mismo, indican los ejecutivos, para minimizar estos riesgos es fundamental mantener una estructura diversificada y balanceada entre dólares y pesos, diversa en términos de los tipos de activos, y que sea coherente con los gastos y obligaciones de cada persona, con su perfil de inversionista, y también con su objetivo de inversión y el plazo en el que quiere invertir.

Conciencia de fluctuaciones

Hay ciertas variables que las personas deben tener en cuenta a la hora de decidir ahorrar en dólares. Spörke, de BTG, indica que la paridad de la divisa estadounidense con el peso chileno tiene una volatilidad de aproximadamente un 12%, “por lo que aquellas personas que ahorran en dólares, pero miden su patrimonio en pesos, deben ser conscientes de las eventuales fluctuaciones que pueden sufrir sus ahorros producto de la volatilidad de la moneda”.

En la misma línea apunta Ospina, de Santander, quien si bien destaca el rol que tiene el dólar en momentos de tensión en los mercados internacionales, entregando un grado de protección ante correcciones bruscas de corto plazo en los activos de riesgo, también hay que tener en cuenta que la fluctuación del dólar afecta el valor de las inversiones y ahorros que estén invertidos en esa moneda, por lo que es importante tener claro la exposición total que tienen los ahorros al dólar, y asegurarse de que esa exposición entregue una adecuada diversificación y, además, se encuentre alineada a las necesidades o gastos personales en esa moneda. 

En otras palabras, Gatica, de BCI, explica que para los inversionistas locales que ven sus portafolios en pesos chilenos, el invertir en dólares conlleva una ganancia o pérdida según varíe el tipo de cambio. Si el peso se deprecia, eso implica que recibirán más pesos por los mismos dólares, lo que equivale a obtener una rentabilidad positiva.

Por el contrario, si se aprecia el peso versus el dólar, el mantener dólares implica una rentabilidad negativa. “Si se quiere evitar este tipo de fluctuaciones y no estar expuesto, existen alternativas de cobertura cambiaria y así fijar el precio del dólar en un periodo determinado”.

Asimismo, se debe considerar que el realizar transacciones en dólares tiene un costo de operación, y es importante conocerlo con anterioridad. En esto, Spörke de BTG indica que, como el mercado cambiario es un mercado bilateral, la mejor forma de minimizar los costos de conversión es cotizando con distintas contrapartes para obtener el mejor precio posible.

Dólar versus alternativas

El ahorro en dólares es para aquellos inversionistas que buscan principalmente diversificar su portafolio de inversión y liquidez, dice Gatica. Ospina agrega que si se compara el comportamiento particular del dólar, se debe considerar que tener dólares es, generalmente, más seguro que invertir en acciones, las que pueden ser más volátiles. Asimismo, si bien invertir en bienes raíces podría ser considerado como un activo más estable, el dólar es más liquido ya que puede venderse de manera casi inmediata a un precio de mercado.

Spörke, en tanto, agrega que sí es clave tener en consideración siempre cuál es la moneda base en la cual el inversionista mide su rentabilidad.

“En caso de medir sus ahorros en pesos, cuando se invierte en acciones en EEUU, se estará expuesto a la variación de la bolsa y a la variación del tipo de cambio.  En un entorno de alta volatilidad monetaria es importante ser consciente de los riesgos asociados a ciclos económicos que podrían impactar a la baja el valor del dólar y por ende registrar una pérdida en los ahorros medidos en pesos”, explica.

Cambios en política monetaria

Las monedas tienen una alta exposición a las decisiones de política monetaria de los distintos bancos centrales, por lo que variaciones en las tasas afectan directamente el tipo de cambio. Este miércoles, la Reserva Federal anunció un recorte de tasa de 50 puntos base, bajándola al rango de 4,75%-5%, cumpliendo los pronósticos más agresivos que preveía el mercado.

“Recortes de tasas de interés suelen tener efectos despreciativos para las monedas de los países que toman dichas decisiones, en especial si tienden a sorprender a las expectativas del mercado”, dice Gatica.  Por eso, añade Spörke, es clave identificar los ciclos económicos: “De esta manera, dependiendo en qué parte del ciclo nos encontramos se debiese tomar la decisión de tener un porcentaje mayor o menor de ahorro en dólares, con el objetivo de evitar tener una sobre exposición al dólar cuando el ciclo de éste es bajista”, advierte.